Mujeres pioneras en ingeniería

Dorothy Vaughan, Ada Lovelace, Edith Clarke. Sus nombres resuenan en la historia, pero quizá no lo suficiente. Fueron pioneras de la ingeniería de hace décadas que lucharon contra la discriminación y la tradición para mostrar su intelecto y sus ideas.
Sandvik está comprometida con la diversidad y la inclusión a todos los niveles, especialmente en lo relativo a los puestos directivos. El número de mujeres directivas en toda la empresa aumentó hasta el 19,8% en 2021, un máximo histórico.
Pero, ¿es suficiente?
Las mujeres representan más de la mitad de los habitantes del planeta, pero tradicionalmente han sido excluidas de las disciplinas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM). Y aunque el número de mujeres en empleos y estudios STEM aumenta cada año, aún queda mucho trabajo de inclusión por hacer. Según un informe de la *UNESCO, las mujeres representan el 29% de la mano de obra de STEM y el 35% de los programas de STEM en la enseñanza superior.

"No es sólo un cambio dentro de la industria lo que tenemos que impulsar, sino un cambioGlobal Technical Support Specialist at Sandvik Coromant Irantzu Sacristán Pérez en la sociedad, en entendernos mejor unos a otros", dice la Especialista en Soporte Técnico Global de Sandvik Coromant Irantzu Sacristán Pérez. En su opinión, compartir historias de mujeres ingenieras es una forma de inspirar y motivar a la próxima generación. Una de esas historias es la de Ada Lovelace. Nacida en 1815, Lovelace concibió y publicó el primer algoritmo para el primer ordenador de propósito general, el Analytical Engine. Se la considera la primera programadora informática y el primer lenguaje de programación, Ada, lleva su nombre. El segundo martes de octubre se celebra el Día de Ada Lovelace, en el que se rinde homenaje a las contribuciones de las mujeres a la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas.
Más mujeres en la ingeniería
Aquién contratan las empresas no es la única cuestión en el debate sobre la inclusión. La forma en que trabajamos puede ayudar a cambiar radicalmente la proporción entre hombres y mujeres en el empleo para que refleje mejor a nuestra población. Tomemos el ejemplo de la minería. Durante milenios, esta industria fue extremadamente intensiva en mano de obra y empleaba casi exclusivamente a hombres. Sin embargo, con las minas automatizadas y conectadas de hoy en día, se requiere un nuevo conjunto de habilidades para realizar operaciones productivas y eficientes.
Päivi Kautiainen, Director de Servicios de Ingeniería de Sandvik Mining and Rock Technology, está de acuerdo: "La minería está cambiando rápidamente: ahora es un negocio global que depende en gran medida de la tecnología. Queremos tener a las personas adecuadas en los puestos adecuados, y valoramos a las personas cualificadas y motivadas. Sería una locura buscarlas sólo en la mitad de la población".

Y la diversidad también importa, sobre todo en lo que respecta al balance final. Según McKinsey & Company, las empresas situadas en el cuartil superior en cuanto a diversidad de género tienen un 15% más de probabilidades de obtener rendimientos financieros superiores a la media nacional de su sector.
Hay muchas oportunidades para que las mujeres dejen su huella
th En la segregada América de principios del siglo XX, los lugares de trabajo diversos eran prácticamente inexistentes, especialmente para las mujeres y las personas de color. Dorothy Vaughan era ambas cosas, pero eso no le impidió convertirse en una de las matemáticas y programadoras informáticas más influyentes de la historia. En 1943 formó parte de la unidad West Area Computing del National Advisory Committee for Aeronautics (que más tarde se convertiría en parte de la NASA), integrada exclusivamente por negros, a los que se consideraba "ordenadores humanos". Sus contribuciones fueron esenciales para el éxito del primer programa espacial estadounidense, a pesar de verse obligados a utilizar baños y comedores separados.
Talento generacional
Edith Clarke, la primera ingeniera eléctrica empleada profesionalmente y la primera profesora de ingeniería eléctrica a tiempo completo, fue otra pionera de principios del siglo XX. Su invento de 1921, la "Calculadora Clarke", era un dispositivo gráfico que simplificaba las ecuaciones que los ingenieros eléctricos utilizaban para entender las líneas eléctricas. Ayudó a construir la presa Hoover, una de las "siete maravillas del mundo industrial", y utilizó analizadores para recopilar datos sobre la red eléctrica, lo que se considera la primera incursión en la tecnología de "red inteligente".
Talitha Groenewold, Automation Applications Engineer at Sandvik Mining and Rock Solutions
"A veces la gente ve primero a una mujer y luego se entera de que eres ingeniera", dice Talitha Groenewold, Ingeniera de Aplicaciones de Automatización de Sandvik Mining and Rock Solutions, "y eso puede ser muy frustrante. Me encanta mostrar a los graduados en ingeniería, especialmente a las mujeres, lo diversa que es nuestra empresa y lo genial que es ser mujer en este sector.
"Se están produciendo tantos cambios, sobre todo en el mundo de la digitalización y la automatización, que hay muchas oportunidades para que las mujeres dejen su huella", afirma Groenewold.
*Informe de la UNESCO: https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000253479
