Inversión estratégica en polvo de wolframio
Con la adquisición de Buffalo Tungsten, Sandvik refuerza su presencia estratégica en Norteamérica y aumenta la producción de polvo de tungsteno utilizando energía renovable.
El tungsteno es uno de los materiales más duros de la Tierra, con un punto de fusión y una densidad extremadamente altos, lo que lo convierte en un metal fundamental en herramientas de minería y fabricación, así como en bienes de consumo como frenos de automóvil, palos de golf, teléfonos móviles y bolígrafos. "No pasa un día sin que utilicemos un objeto que contenga tungsteno o un producto fabricado con una herramienta de tungsteno", afirma Alex Nieuwpoort, Presidente de Wolfram Bergbau- und Hütten en Austria, productor de polvo de tungsteno y parte de Sandvik.
El tungsteno proporciona literalmente el filo de corte de las plaquitas y brocas para aplicaciones de mecanizado y minería. Para garantizar el suministro de un material tan estratégico tanto para Sandvik como para sus clientes de diferentes sectores, Sandvik adquirió Buffalo Tungsten Inc. (BTI), con sede en el estado de Nueva York, en diciembre de 2023.
Avances en la producción sostenible
"Tener una huella norteamericana es importante para nosotros y nuestros clientes, ya que reduce los desafíos logísticos y permite plazos de entrega más cortos. Con la adquisición de BTI, Sandvik también obtiene acceso a la tecnología de producción de polvo de tungsteno de alta calidad utilizando electricidad", afirma Nieuwpoort.
BTI utiliza la electricidad producida por la central hidroeléctrica de las cercanas cataratas del Niágara. También se utiliza para producir hidrógeno por electrólisis, lo que contribuye a la sostenibilidad de las operaciones de BTI.
La adquisición de BTI también reduce el impacto medioambiental, ya que Sandvik puede servir tanto a sus clientes como a sus propias unidades en Norteamérica sin necesidad de realizar envíos de larga distancia. "Esto minimiza el riesgo de interrupciones en nuestra cadena de suministro y garantiza un suministro constante y fiable al mercado estadounidense, lo cual es muy importante para Sandvik", afirma Nieuwpoort.
Aumento de la diversidad de productos
BTI está especializada en polvo de tungsteno de granulometría más grande, mientras que Wolfram lo está en granos más finos. Esto significa que las dos empresas se complementan bien, ofreciendo diferentes tamaños de grano para abordar diversas aplicaciones e industrias.
"La perforación de rocas requiere propiedades de material diferentes a las de la perforación de acero. Los granos de mayor tamaño son los más adecuados para las herramientas utilizadas en la perforación de rocas, ya que eso requiere dureza en caliente combinada con resistencia a los golpes y tenacidad", explica Nieuwpoort. "Las aplicaciones de mecanizado de alta velocidad, por otro lado, requieren tamaños de grano submicrónicos y uniformes para evitar el agrietamiento debido a la alta tensión y las altas temperaturas durante el taladrado".
El camino por recorrer para la producción de wolframio
La adquisición de BTI y la complementariedad de ambas empresas encierran un gran potencial: "Compartir nuestras experiencias y conocimientos, y aprender unos de otros, aumentará enormemente nuestras capacidades, allanando el camino para nuevos métodos de producción y una cartera ampliada de polvos. Estoy impaciente por ver qué nos depara el futuro".
Los hechos: Esto es BTI
Buffalo Tungsten Inc. (BTI) comenzó su andadura en 1986 en Depew, Nueva York, con la visión de convertirse en un productor líder de materiales a base de tungsteno. La empresa utiliza las últimas tecnologías en hornos y clasificación de polvos. Los hornos transforman materiales intermedios de tungsteno en polvos puros de tungsteno de hasta un 99,999% de pureza. Con más de 30 años de experiencia y un enfoque exclusivo en productos de polvo de tungsteno, BTI produce materiales de alta calidad optimizados para una amplia gama de aplicaciones comerciales e industriales.
BTI personaliza los polvos para cumplir las especificaciones de las propiedades físicas y químicas, incluido el tamaño de las partículas, la distribución del tamaño de las partículas y la densidad. Las características críticas se miden con precisión en varios pasos del proceso de fabricación para garantizar la calidad constante de los polvos de tungsteno acabados.